El Candor del Padre Brown

Hemos recibido una grandísima alegría: ha comenzado la serie de entradas sobre el Padre Brown en el Blog de la Sociedad Chestertoniana de España, uno de mis blogs favoritos. Agradecemos a Fran por su trabajo comentando El Candor del Padre Brown, especialmente si consideramos que las entradas sobre el Padre Brown las hemos esperado con ansias durante el 2011. En la entrada, cuya lectura obviamente recomiendo, se presenta información muy interesante sobre el cuento La Cruz Azul, del cual ya ofrecimos algunos detalles antes (Leído en La Cruz Azul y Más sobre el párrafo de La Cruz Azul). Destaco la mención de una posible alegoría en el final del cuento, alegoría que para mí había pasado totalmente desapercibida. Excelente presentación, esperamos más material y comentarios sobre el Padre Brown en futuras entradas.

Indeleble

La primera recomendación del año: Indeleble, colección de historias nacidas de la mente brillante, efervescente y salvadoreña de Ligia María Orellana. Piense y diviértase (orden intencional) durante un rato, adquiera indelebles conexiones sinápticas, vaya y confirme la grandeza de este libro aquí mismo: Indeleble. Hágame caso, es una lectura que agradecerá. Indeleble proyecta con excelencia el estilo tan peculiar de Ligia, algo así como un rock en texto, con acordes satíricos, irónicos, impregnados de humor… y sin embargo, en el fondo, descubrirá el lector atento la persistencia de una mirada tierna examinando el alma sensible, lo humano. Ligia es inteligencia pura, una autora excelente (ya celebramos antes el relato Manifesto Tercermundista de su libro Combustiones Espontáneas).

Me reí muchísimo con el Tripin versión selecta, especialmente con el pase Matrix en la página 14. Además, el cuento “Harvey P. va por Aminah hasta África” pasa a mi lista de favoritos; el cuento contiene varias ideas que espero comentar en un futuro próximo. Libro recomendadísimo.

My Sweetheart on the New Year

Poema de Nizar Qabbani (Damasco, 1923 – Londres, 1998)

 

I love you
I do not want to link you with any memory of the past
nor with the memory of passing trains
you are the last train; night and day it travels
across the veins of my hands
You are the last train
and I am your last station.

I love you
I do not wish to link you with water… or wind
with the Muslim or Christian calendars
with the motion of ebb and flow
with the hours of solar and lunar eclipse
I do not care what the observatories say
nor the signs in the coffe cup
for your eyes alone are the prophecy
They alone are responsible
for the joy in the world.


Note: Translation by Lena Jayyusi and Christopher Middleton.